Debo confesarte algo: no recomiendo hosting gratuito, ¿por qué? En este artículo quiero explicártelo a detalle.
Cuando inicias un proyecto en línea, ya sea un blog, una tienda o cualquier otro tipo de sitio web, una de las primeras decisiones que debes tomar es dónde alojarlo.
Lee este análisis: Hosting gratuito Vs. Hosting de pago.
El hosting gratuito aparece como una opción atractiva, especialmente cuando estás tratando de mantener bajos los costos. Sin embargo, a pesar de su aparente ventaja económica, hay varias razones por las que no recomiendo utilizar un hosting gratuito:
Tabla de contenido
Limitaciones del hosting gratuito
El adagio «lo barato sale caro» suele ser cierto en el mundo del alojamiento web. Aunque la oferta de un hosting gratuito parece tentadora al principio, a largo plazo, las limitaciones afectan la viabilidad y el crecimiento de tu sitio:
Recursos limitados
Los proveedores de alojamiento gratuito generalmente ofrecen un espacio en disco y ancho de banda muy limitados.
Esto resulta en tiempos de carga lentos y problemas de accesibilidad cuando el tráfico aumenta.
Publicidad no deseada
Muchos servicios gratuitos insertan su propia publicidad en tu sitio, lo que es molesto para tus visitantes, y los desvía de tu contenido o productos.
Falta de soporte técnico
Es común que los proveedores alojamiento gratuito ofrezcan poco o ningún soporte. Si enfrentas problemas técnicos, es probable que estés solo para resolverlos.
Poca fiabilidad
Los sitios alojados en servicios de hosting gratuito tienden a tener más tiempo de inactividad, lo que es perjudicial para la reputación y la experiencia del usuario.
Limitaciones en la personalización
Las opciones para configurar, personalizar e instalar herramientas o plugins suelen ser muy restringidas en plataformas de hosting gratuito.
La importancia de una buena primera impresión
Tu sitio web es, en muchos casos, el primer punto de contacto entre tú y tus visitantes o clientes. Debes ofrecer una experiencia positiva desde el principio.
Con uno gratuito, corres el riesgo de ofrecer una experiencia de usuario de baja calidad debido a la lentitud de carga, la publicidad intrusiva o la inactividad del sitio.
Esto hace que tu sitio parezca menos profesional y disminuye la confianza del usuario.